Atendió Seapal oportunamente 4,247 fugas de agua potable
Durante el 2015






- De los 16 reportes diarios que en promedio atendió el organismo durante el 2015, resultaron falsos o erróneos el 27%.
El Sistema de los Servicios de Agua Potable, Drenaje y Alcantarillado -Seapal-de Puerto Vallarta, reparó oportunamente 4,247 fugas de agua potable durante el año 2015, de las cuales 84% se presentaron en tomas domiciliarias y 16% en la red de distribución y conducción.
Lo anterior lo informó el director general del organismo, César Abarca Gutiérrez, quien precisó que el 95% de estas rupturas de tuberías fueron ocasionadas por el deterioro de la red y el 5% provocadas por los trabajos realizados por empresas contratistas.
En ese sentido, el titular de la paraestatal detalló que más del 50% de los 1,600 kilómetros de tuberías de agua potable han concluido su periodo de vida útil, por lo que afirmó que continuará la gestión de recursos ante instancias federales y estatales, para atender la urgente modernización de dicha infraestructura.
Agregó que de los 16 reportes diarios que en promedio atendió el organismo durante el 2015, resultaron falsos o erróneos un 27%, situación que generó gastos y retraso de tiempo, para atender otros puntos de la red.
Abarca Gutiérrez reconoció el trabajo y esfuerzo de los trabajadores del organismo por mejorar la operación de las líneas hidráulicas, lo que generó la reducción de fugas en la red de distribución, en un 29% con relación al 2014.
Por su parte, el jefe de Distribución de Agua Potable, Alejandro Padilla Viorato relató que dicha mejora es el resultado de acciones como la regulación de presiones en la red, reorganización de los circuitos hidrométricos, mantenimiento a las válvulas reguladoras, así como desfogues nocturnos que se realizan cotidianamente en todo el municipio.
Finalmente, el funcionario del área técnica agradeció a la ciudadanía tomarse unos minutos de su tiempo para reportar al sistema operador de agua, fugas o escurrimientos que se presentan en las calles, con lo que se evitan pérdidas y derrames mayores del vital líquido, optimizando además los recursos humanos y materiales de la institución.